martes, 11 de junio de 2013

Piel joven con resveratrol



  • Bautizado como la molécula de la eterna juventud, el resveratrol es un antioxidante cuyos efectos parecen sorprendentes: retrasa el envejecimiento y previene algunas enfermedades. Su potencial reparador ha interesado al sector cosmético, que lo ha incorporado en productos para el cuidado de la piel. No obstante, la falta de datos objetivos acerca de cómo actúa dispara las dudas. ¿Será el resveratrol simplemente un mito o se trata de un potente rejuvenecedor cutáneo?

    Vino tinto, uvas, cacahuetes, nueces, moras y arándanos son algunos alimentos que contienen resveratrol. En las farmacias y en internet se venden decenas de suplementos nutricosméticos, cremas y serums antienvejecimiento a base de este ingrediente. Identificado en 1940, el resveratrol tiene propiedades antioxidantes y antiinflamatorias. Pero la popularidad le llegó en el 2003, cuando el doctor David Sinclair, de la Universidad de Harvard (Estados Unidos), publicó estudios que aseguraban que alimentar a ratones con resveratrol aumentaba en un 40% su esperanza de vida. Si estos resultados pudiesen demostrarse en humanos, ¡llegaríamos a vivir unos 136 años!

    Según Sinclair, el poder reparador del resveratrol se explica porque aumenta unas proteínas, las sirtuínas, que actúan en situaciones de estrés físico, como cuando permanecemos largas horas en ayunas.

    Juventud la para piel
    Previene el cáncer, baja el azúcar a los diabéticos, mejora el rendimiento del corazón, protege las células del cerebro y combate infecciones causadas por virus... No está mal.

    ¿Y qué hace el resveratrol en la piel? Un trabajo publicado en Photochemistry and Photobiology explica cómo la piel tratada con resveratrol envejece menos frente a la radiación ultravioleta, ya que este activo aumenta la vitalidad de los queranocitos de la epidermis, que son las células que renuevan la capa superficial de la piel. Así, el daño solar tiene menos consecuencias, ya que la piel afectada por el sol se repara y renueva más deprisa.

    Ácido oleico, el mejor aliado
    La industria cosmética no dejó pasar la oportunidad de incorporar resveratrol en sus fórmulas para productos de belleza. Pero se topó con un obstáculo importante: el resveratrol se disuelve mal en el agua y sus efectos se desvanecen en medios ligeramente ácidos (como la piel humana). El ácido oleico, presente en los aguacates y el aceite de oliva, resultó ser el mejor aliado: mezclado con resveratrol, la piel absorbe ambos compuestos.

    El ácido oleico actúa sobre la epidermis (capas superficiales), aumentando su grosor, y también penetra hasta las capas más profundas (dermis), dónde estimula la fabricación de colágeno y elastina. Además, aporta ácidos grasos omega (3, 6 y 9) que la protegen de las agresiones externas, la regeneran y la nutren en profundidad.

    La doctora Ellen Marmur, del Hospital Mount Sinai (Estados Unidos), ha llevado a cabo estudios sobre estos dos activos y finalmente avala a la más conocida de las firmas cosméticas que han apostado por el resveratrol combinado con ácido oleico: su producto estrella –una fórmula patentada– disminuye las arrugas cutáneas en un 40%.

    ¿Tiene futuro el resveratrol?
    A pesar de los buenos resultados del resveratrol en medicina y en cosmética, a menudo se oyen alarmas: existen pocos estudios clínicos en humanos que permitan predecir los efectos y las consecuencias de su uso prolongado o en cantidades excesivas. Hay quien advierte que su utilización debería estar más controlada.

    No obstante, si se resuelven las dudas acerca del resveratrol, ya sea ingerido como suplemento o aplicado sobre la piel, su contribución a la medicina moderna podría ser incluso mayor que el descubrimiento de la penicilina... Eso es, al menos, lo que afirma James Betz en el libro Resveratrol: mito o milagro?, publicado en 2011, aunque nosotros, de momento, condicionamos nuestra opinión a nuevas evidencias científicas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario